EXPERIENCIAS QUE ENSEÑAN

LA SELECCIÓN Y FORMACIÓN DEL PROFESORADO

Al culminar el Año Académico en el hemisferio sur, se evalúa (entre otros factores del aprendizaje) el desempeño docente, y por eso creo que es muy iluminador  el artículo del investigador educativo del Colegio Claret de Barcelona Xavier Melgarejo. Él nos lleva a conocer (un poco más) el porqué tenemos que agradecer la experiencia de Finlandia, proponiéndonos un modelo explicativo del "funcionamiento de los sistemas educativos",  teniendo como clave  la Selección y Formación del Profesorado (cf Artículo de la Revista Educación). 

Los buenos resultados de los estudiantes es el objetivo de los sistemas educativos que adopta un país, para cualquier reforma o actualización de sus paradigmas educativos, y que se concretiza en el Proyecto Educativo de cada escuela, de cada colegio. Por lo tanto, el PEI es el fundamento de todo el proceso educativo, clarifica el rol y funciones de cada uno de los agentes, y es el profesor quien debe manejar, con especial destreza esta vital herramienta, con la capacidad, creatividad y entusiasmo propios de quien es guía, instructor, formador, educador por vocación.

Si bien los agentes principales de todo proceso educativo son los estudiantes, la trayectoria curricular, las cualidades de mediador digital, y la certificación del docente, con una buena dosis de esperanza, según Patricia Gonzalez , ayudará a revisar  los parámetros de evaluación para la selección del profesorado.

¿Quiénes evalúan los postulantes a ocupar un cargo de profesor? ¿Tiene la meritocracia el peso debido ante la realidad que se evalúa? ¿Se mide la calidad docente por los resultados de sus estudiantes? ¿Qué parámetros de actualización docente se manejan? ¿Se tiene claro el tipo de profesor que se requiere?... no será  tan fácil encontrar el profesor ideal, prototipo de perfección, pero sí será un gran paso si los evaluadores  son especialistas en conocer la buena de la mediocre o mala "madera", si demuestran que son "buenos compradores de perlas finas", pues uno de los lastres más difíciles es tener que compartir con profesores  que han perdido (a acaso nunca han tenido) las ilusiones y el entusiasmo, que han perdido la curiosidad, el hambre por descubrir, la inventiva propia de la vocación docente.

Creo que muchos coincidimos en la importancia de la formación inicial docente y la selección de los profesores, como nos ha enseñado Finlandia, si deseamos buenos resultados, y que el incluir profesores en una comunidad educativa no puede tomarse como un proceso más, para completar cuadros, sino que merece una atención muy especial para alcanzar los buenos resultados educativos.

  

Quienes seguimos viendo la educación como se disfruta de los atardeceres siempre nuevos y singulares cada día, colaboremos en la capacitación permanente de los profesores y la selección de nuevos profesores. Necesitamos trabajar con profesores que tengan y/o den muestras de ser capaces de cooperar con una sólida base profesional y la suficiente creatividad necesaria para el diseño y rediseño de los nuevos caminos educativos. 

Trujillo, 20 de diciembre del 2015